miércoles, 28 de octubre de 2009

No te dejes presionar


No importa de donde proviene, la presión es uno de los factores que más afecta a los atletas sin importar su especialidad. Integrante del equipo periodístico de El Depornauta, la licenciada Romina Plataroti lo vivió desde ambos lados del mostrador porque a sus conocimientos como psicóloga especializada en deportistas de mediano y alto rendimiento, le agregó la experiencia adquirida a lo largo de su trayectoria como la mejor gimnasta de la historia argentina que incluye una medalla de bronce en los Panamericanos de La Habana 1991 y la participación en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. Hacé una pausa, bajá las revoluciones y leé estas líneas que te ayudarán a enfrentar más relajado tus desafíos dentro y fuera de las pistas.El control de las presiones es un aspecto psicológico que considero de suma importancia, hay que trabajarlo mucho con el deportista para que pueda dominarlo y así lograr su máximo rendimiento durante las competencias.Estas presiones pueden ser internas, autoexigencias que el atleta se impone a sí mismo al creer que nada tiene sentido si no logra un determinado objetivo, por ejemplo, pensar “si fallo en este ejercicio no sirvo para nada, todo estará perdido, mi carrera quedará arruinada”. También existen las presiones externas, son aquellas generadas en ciertas ocaciones por los entrenadores; el público; los medios de comunicación; los auspiciantes; el representante e incluso los propios padres, especialmente en los deportes practicados por niños y adolescentes.Es usual que un deportista no pueda realizar determinadas habilidades técnicas en competencias o partidos porque se tensiona pese a que esos movimientos o ejecuciones las desarrolla en forma eficaz durante los entrenamientos. Una de las posibles causas, podría ser la dificultad de manejar la presión cuando la competencia se vuelve amenazante, se hacen presentes pensamientos negativos; ansiedad y miedo, todo esto no permite rendir de acuerdo al máximo potencial.El poder manejar las presiones que provienen de nosotros o del entorno, saber como responder ante ellas, es una fortaleza mental que se puede desarrollar y que muchas veces determina el resultado de un torneo o un partido, sobre todo en el alto nivel competitivo donde los atletas tienen similares capacidades físicas y técnicas. Es ahí, en aquellas situaciones en que la diferencia entre un deportista y otro es mínima en el aspecto físico y técnico, donde el aspecto mental juega un rol preponderante.

Artículo escrito para el Depornauta
Lic.Romina Plataroti

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